
Cómo escribir diálogos que resulten interesantes para el lector es una de las cosas que con frecuencia se preguntan alumnos e interesados en la escritura creativa. Y uno de los pecados que debe evitar un buen escritor a la hora de escribir diálogos, es que estos sean estáticos. El diálogo que podemos denominar “inmóvil” es como si no existiera. Si un diálogo no aporta nada a la acción de los personajes ni a la trama, podría suprimirse.
A continuación, voy a tratar de dar algunos consejos para escribir diálogos interesante y dinámicos.
Un diálogo debe influir en los personajes
No hay que olvidar nunca que lo que pone en marcha una historia son las acciones que el personaje emprende. Y eso es algo que también debemos tener en cuenta a la hora de escribir las partes dialogadas.
Para que el diálogo sea también una acción, debe poder influir en la realidad, es decir, en los personajes que intervienen en el diálogo, debe contribuir a la trasformación de lo que está sucediendo en la historia y, por tanto, también a la transformación del protagonista o protagonistas.
La respuesta de un personaje a una determinada pregunta, por ejemplo, puede influir en la siguiente pregunta que uno de los personajes iba a hacerle. Las opciones de un personaje pueden hacerle cambiar de parecer a otro.
Así mismo, un diálogo puede hacernos sospechar de la veracidad de alguno de los interlocutores, si miente o si oculta algo, y esto valdrá también para el resto de personajes que están escuchando o participando de la conversación. Para ello, es importante tener en cuenta los gestos del personaje que miente. Mostrar su rostro, sus microgestos, su actitud, etc. En definitiva, tener en cuenta tanto el lenguaje verbal como el no verbal.
Pongamos que un personaje sospecha que su amigo, pareja o socio le ha traicionado y decide preguntarle al respecto. Está claro que la reacción y contestación de la otra persona influirá en las acciones que tomará después. Si no le cree, tal vez puede decidir abandonarla, o disolver la empresa o matrimonio.

En El señor de los anillos de J. R. R. Tolkien, Gandalf será un personaje fundamental que influirá en las acciones del resto de personajes. Entre otras cosas, será el encargado de contarle a Frodo Bolsón la historia del anillo y de advertirle del peligro de poseerlo, lo que determinará finalmente su viaje a Mordor.
Un diálogo modifica el curso de los acontecimientos de la historia
Es inevitable pensar que el diálogo es acción, cuando nos damos cuenta de las consecuencias, de lo que pasa después y de cómo una determinada conversación influyó en ello. A continuación, algunos ejemplos en los que un diálogo literario se convierte en acción y cambio es cuando:
-Modifica en un personaje la percepción que tiene de otro personaje, o de una una situación. ¿Verdad que muchas veces, dialogando con otra persona, nos enteramos de algo que cambia la percepción que teníamos de ella?
-Le obliga a tomar una decisión.
-La información que le ha proporcionado al personaje le lleva a querer hacer algo. Por ejemplo, a querer averiguar algo.
-Sin la información que le ha proporcionado el diálogo a nuestro protagonista, la historia hubiese seguido otro curso, otra dirección.
Simone de Beauvoir explica muy bien en su libro de memorias “La plenitud de la vida” esta idea de diálogo que es acción:
Hay una regla menos rigurosa, pero cuya eficacia conocía por la lectura de Dashiell Hammet como por la de Dostoiesvky y que traté de aplicar. Toda conversación debe ser en acción, es decir, modificar las relaciones de los personajes y el conjunto de la situación. Además, mientras se desarrolla, una cosa importante tiene que ocurrir en alguna otra parte: por lo tanto, tendido hacia un acontecimiento del que lo separa el espesor de las páginas impresas, el lector siente como los mismos personajes la resistencia y el paso del tiempo.
De las influencias que he sufrido, la más manifiesta es la de Hemingway, que varios críticos han señalado. Uno de los rasgos que apreciaba en sus relatos era su rechazo de las descripciones pretendidamente objetivas: paisajes, decorados, objetos, están presentados según la visión del personajes en la perspectiva de la acción. Yo trataba de hacer la misma cosa y, también, de imitar como él el tono, el ritmo del lenguaje hablado, sin temer las repeticiones ni las futilezas.
Consejos para escribir buenos diálogos literarios
Dicho esto, cuando nos sentemos ante la hoja en blanco o el ordenador para escribir una conversación debemos preguntarnos siempre cómo escribir diálogos que no resulten estáticos.
Lo primero que debemos tener siempre presente para escribir buenos diálogos literarios (hemos dedicado una entrada a los errores más frecuentes) es que un interlocutor no puede decirle a otro algo que se supone que ya sabe y que, por tanto, lo saben los dos. Con frecuencia, los escritores principiantes utilizan los diálogos para proporcionar la información al lector, lo cual es un gran error. Sí, he dicho «gran» error. Sin embargo, lo vemos en muchas series de televisión y en algunas películas, también. Es como recibir una bofetada detrás de otra después de cada parlamento. A mí me saca de la historia, la verdad.
Los diálogos pueden servir para dar información a los personajes, y por tanto es una forma de que el lector se entere también, pero no deben estar solo y únicamente con la intención de proporcionar la información a los lectores. Debemos encontrar el modo de que el lector sepa de lo que están hablando los personajes, sin que el diálogo resulte antinatural.
Suele dar buen resultado dar por supuesto que el lector ya conoce esa información y, después, una vez hayamos terminado de escribir la escena, en la etapa de revisión, comprobar si efectivamente el lector tiene toda la información importante que necesita para seguir con la historia, la suficiente para no perder el hilo de la historia. Es posible, además, que el hecho de dejar lagunas en la historia cree una cierta tensión narrativa, una intriga, una curiosidad en el lector que le impulse a seguir leyendo y que, poco a poco, irá descubriendo.
Si además de escribir diálogos interesantes quieres aprender a escribirlos correctamente, consulta la entrada cómo puntuar diálogos correctamente.
Para seguir aprendiendo sobre cómo escribir diálogos, sigue leyendo nuestro blog y conoce los errores más frecuentes en la escritura de diálogos literarios.
Bibliografía:
Azuar Carmen, Rafael. Teoría del personaje literario y otros estudios sobre la novela.
Beauvoir, Simone. La plenitud de la vida.
Perdón, ¿podrían dar algo de información sobre la gramática u ortografía del diálogo?
Y la otra, ¿como escribir un monologo?
Tenía apuntado hacer alguna entrada sobre cómo escribir correctamente los diálogos, me lo apunto como prioritario. La incluiremos en la categoría de Gramática.
Lo del monólogo es muy genérica la pregunta, pero veremos qué podemos hacer.
Gracias por pasarte por aquí, María Isabel.
Ya hemos añadido una entrada sobre cómo puntuar diálogos.
Hola, estoy escribiendo un relato basado en un viaje de un marinero ambientado en una base de la Antártida argentina en 1974 y quiero escribir unos diálogos entre dos marineros. Cómo se podría redactar.
Pd: Me sirvió de mucho el Blog
Gracias
Pues no sé cómo puedo ayudarte, Jorge. No conozco la historia ni la trama ni los personajes. Me temo que no puedo escribir la historia por ti, je, je.
Como punto de partida, piensa en los objetivos de los personajes, qué quieren, qué conflictos tienen… Busca de qué manera ese diálogo puede influir en los marineros en el futuro: en las decisiones que van a tomar, en descubrir algo, en ver las cosas desde otro punto de vista, etc. No sé, son ideas.