
En la actualidad, son muchas las personas que dedican parte de su tiempo a escribir. No es que todas ellas hayan decidido dedicarse a literatura, sino que son muchos los que suelen escribir en un blog personal, tienen una web profesional en la que hablan sobre su trabajo o colaboran en alguna revista digital en la que ofrecen consejos sobre ciertos temas que dominan. También, quien más o quien menos escribe alguna vez un comentario en un blog, reseña algún libro que ha leído o comenta una película que ha visto recientemente. Aprender a escribir mejor es pues un interés que va en aumento no solo para los aspirantes a escritores.
¿Tiene importancia cómo escribo si solo quiero escribir en un blog personal o en una web?
Todavía hay quien se pregunta para qué aprender a escribir mejor si uno no quiere ser escritor. ¿Qué importancia tiene cómo escribo? Lo que se debe tenerse en cuenta es lo que escribo, mi forma de trabajo o la información que proporciono.
Sí, eso es muy importante, pero piensa que hoy en día muchos de los contactos y clientes de un negocio o de profesional llegan a través de la web o el blog personal. En pocos minutos, cualquier persona puede encontrar cientos de profesionales que, al igual que tú, hacen bien su trabajo. Entre todos ellos, ¿por qué iban a escogerte a ti? Tendrás que destacar sobre tu competencia. Por eso, lo que digas es tan importante como la forma en que lo digas, porque de cómo lo digas dependerá lo que transmitas a tus clientes, de cómo lo digas dependerá la imagen que el cliente se hace sobre ti y sobre tu negocio.
Tu web o tu blog personal es tu tarjeta de presentación virtual
Los contenidos de tu web o tu blog tienen un papel tan importante como la imagen. Un cliente online no puede verte personalmente. Podría decirse que el logo y la imagen de tu web es el equivalente a la ropa que llevas puesta. Los contenidos serían el equivalente a tu forma de hablar y de expresarte. Si piensas que un cliente le basta con echar un vistazo general a tu web antes de contratarte estás muy equivocado. Tus futuros clientes leerán incluso las páginas más escondidas de tu web (esas que a lo mejor has puesto solo para hacer bulto), y se harán una idea general de ti y de tu negocio. Esa idea general puede ser lo que desequilibre la balanza para contactar contigo o no, y puede que para finalmente contratarte.
Una web o un blog personal es una tarjeta de presentación virtual. Probablemente requerirás de varios profesionales que lleven a cabo su diseño y creación. Entre ellos, un diseñador gráfico que te diseñará un logo, que será la cara de tu empresa; y un diseñador para el diseño de la página web, que será quien te ayude a trasmitir la imagen general que deseas para tu negocio, algo así como tu despacho virtual. Sin embargo, es importante que seas tú quien proporciones las indicaciones que consideres importante a ambos profesionales para que ellos se encarguen el diseño final. ¿Qué quieres trasmitir? Una imagen de empresa joven y con iniciativa, o mejor un profesional serio y experto, prefieres hacer hincapié en el trato directo, o la rapidez y eficacia… No puedes escogerlo todo. Necesitas destacar en algo frente al resto de tus competidores: necesitas ser diferente.
En el caso de un blog personal, piensa qué cualidades quieres destacar de ti, qué imagen te gustaría dar a los demás. Pregunta a tus amigos qué piensan de ti y cómo eres. No te cortes y cuéntaselo al diseñador. Si eres tú quien va a realizar el blog, piensa en cómo reflejar en él esas ideas.
La importancia de los contenidos
Después de pasar esta primera etapa del diseño, son muchos los profesionales que deciden redactar ellos mismos los contenidos que proporcionarán al diseñador para incorporarlos en las páginas de su web, y no siempre saben cómo hacerlo. Incluso cuando contratan la redacción de contenidos, con frecuencia la realizan también profesionales especializados en el diseño de páginas web, pero no son profesionales de la escritura, y no conocen a fondo tu negocio, no tanto como tú.
Mi consejo es que seas tú quien al menos estructure los contenidos de tu web, aunque después contrates a alguien para que los revise, no solo ortográfica y gramaticalmente, sino también en cuanto al estilo. Debes dedicar, eso sí, tiempo suficiente para analizar lo que quieres decir y a pensar cómo trasmitirlo. Pregúntate cuál es la intención u objetivo de cada uno de los textos que subes a tu web. En ocasiones será facilitar una información, otras motivar al cliente o visitante a hacer una consulta o escribir un comentario. También, cómo no, el objetivo puede ser comprar un producto o contratar un servicio, así como que vuelvan a visitarte.
Piensa en el destinatario de tu texto
Lo primero es plantearte a quién quieres que vaya dirigido, si quieres centrarte solamente en profesionales afines a tu negocio o al público en general. De esto dependerá el lenguaje a escoger, y si tendrá o no un alto nivel técnico.
En cualquier caso, recuerda que no se trata de demostrar lo que sabes, si no de que sirva a los demás. Lo importante es que tenga interés para el lector más allá de para conocerte un poco, por eso es importante también ser claros, no olvidarnos que ante todo se trata de expresarnos con naturalidad y de ser amenos.
Sé creativo
Como he dicho, son cientos los blog o páginas web profesionales similares al tuyo, para destacar entre las demás debes ser original y creativo. No te quedes con la primera idea que se te ocurra, dale un par de vueltas, piensa qué puedes añadir para que resulte más interesante o atractiva, sin perder de vista el objetivo marcado.
Como resumen, estas son algunas de las cosas a tener en cuenta a la hora de escribir en un blog o de redactar los contenidos de tu web:
- Ordena las ideas que quieres reflejar y organiza toda la información de que dispones.
- Determina tú mismo los objetivos de cada uno de los textos y contenido de tu web.
- Estudia y analiza el perfil del destinatario de tu blog o web.
- Escoge el lenguaje adecuado dependiendo del público al que va destinado (más técnico o más coloquial).
- Escribe sin perder de vista la naturalidad y la claridad en tu exposición.
- Emplea la presentación más adecuada para la finalidad del documento, y haz que resulte amena y atractiva.
- Sé original. Utiliza tu creatividad. Sé tú mismo.
Hola, consejos muy útiles si queremos destacar en la blogosfera. Ciertamente, tenemos que seducir al visitante en cualquier forma posible. Ser creativos y originales son condiciones indispensables. El lector quiere encontrar algo que lo nutra, ilustre, o divierta. Si el contenido es rico él se dará cuenta y me seguirá leyendo. Quiero, que quien me lea una vez, me lea dos o cien veces. Mi blog tiene miles de visitantes de todos los países. Es verdaderamente internacional. Trato de ofrecer lo mejor en reflexiones y filosofía a través de mis poemas, cuantos, ensayos.
Aquí les dejo un botón de muestra:http://letrasarteyoriginalidad.blogspot.mx/2018/05/al-calor-de-tu-regazo.html